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Philippine Leroy-Beaulieu practica yoga Iyengar desde hace 15 años: así cuida su cuerpo la actriz de Emily in Paris

La actriz francesa de 62 años revela su filosofía de movimiento: yoga Iyengar, caminatas por el bosque y escuchar al cuerpo sin obsesiones.

Lucía Fernández
Lucía Fernández

Especialista en Meditación y Bienestar

Philippine Leroy-Beaulieu practica yoga Iyengar desde hace 15 años: así cuida su cuerpo la actriz de Emily in Paris

Philippine Leroy-Beaulieu, la actriz que interpreta a Sylvie Grateau en Emily in Paris, ha revelado que lleva 15 años practicando yoga Iyengar. A sus 62 años, su filosofía de bienestar es refrescantemente simple: movimiento libre, sin obsesiones y escuchando al cuerpo.

Con el estreno de la quinta temporada de la serie en diciembre de 2025, la actriz francesa ha compartido los secretos detrás de esa elegancia y vitalidad que tanto admiramos en pantalla. Y sorpresa: no hay rutinas imposibles ni entrenamientos extremos.

Una práctica sin rigidez

En una entrevista con Marie Claire, la actriz francesa explicó su enfoque: “Hago muchas cosas diferentes. Camino mucho. Practico yoga Iyengar desde hace 15 años. A veces hago un entrenamiento básico cuando estoy sola en casa”.

Lo que destaca de su rutina es la flexibilidad mental. “Hago cosas distintas según mi estado de ánimo; no soy obsesiva con una sola disciplina. Me gusta mantenerlo simple y divertido”, confesó.

Esta actitud refleja algo que muchos practicantes de yoga tardan años en aprender: la práctica debe adaptarse a ti, no al revés.

Caminar como meditación activa

Leroy-Beaulieu describe semanas donde caminar es su único ejercicio, y otras donde el yoga se convierte en ritual diario. “A veces es una semana en la que camino mucho y no hago nada más, y a la siguiente hago yoga cada mañana. Me siento bien así porque me siento libre”.

Sus caminatas por los bosques al sur de París son verdaderas sesiones de mindfulness: “El oxígeno, la luz del sol, la naturaleza, respirar… Me paro, me como mi pequeño sándwich, escucho a los pájaros y luego cojo el tren de vuelta a París”.

La actriz describe una de sus rutas favoritas: tomar el tren hacia el sur de París, bajarse en una estación y cruzar el bosque caminando hasta la siguiente parada, un recorrido de unas cuatro horas. “Es maravilloso”, asegura. Una práctica que combina ejercicio cardiovascular con los beneficios demostrados del contacto con la naturaleza.

Por qué yoga Iyengar

El yoga Iyengar que practica la actriz se caracteriza por la precisión en la alineación y el uso de props como bloques y cinturones. Es un estilo especialmente adecuado para:

  • Quienes buscan corrección postural
  • Personas con lesiones o limitaciones físicas
  • Practicantes que prefieren profundidad sobre intensidad
  • Cualquiera que valore la técnica sobre la velocidad

A los 62 años, este enfoque metódico permite mantener una práctica sostenible que cuida las articulaciones mientras desarrolla fuerza y flexibilidad.

El yoga Iyengar fue desarrollado por B.K.S. Iyengar, quien practicó y enseñó hasta pasados los 90 años. Es un estilo que envejece bien con el practicante, adaptándose a las necesidades cambiantes del cuerpo sin perder profundidad ni beneficios.

Cómo aplicar esta filosofía en tu práctica

El enfoque de Leroy-Beaulieu ofrece varias lecciones para cualquier practicante:

Varía tu rutina según tu energía. No todos los días piden la misma práctica. Algunos días tu cuerpo necesita movimiento activo; otros, solo caminar o estirar suavemente.

Incorpora el movimiento en tu vida cotidiana. Una caminata larga puede ser tan valiosa como una clase de yoga. Lo importante es moverse con consciencia.

Elimina la culpa. Si una semana no practicas asanas, no pasa nada. El bienestar no se construye con obsesión, sino con constancia flexible a lo largo del tiempo.

Conecta con la naturaleza. Caminar por un parque o bosque añade beneficios que ningún gimnasio puede replicar: luz natural, aire fresco y el efecto calmante del entorno verde.

La lección: menos es más

El mensaje de Philippine Leroy-Beaulieu conecta con la esencia del yoga: no hay que forzar. El bienestar viene de la constancia relajada, no de la obsesión. Caminar, estirarse, respirar conscientemente. Gestos simples que, practicados con libertad, marcan la diferencia.

En una cultura que glorifica los entrenamientos intensos y las rutinas estrictas, la actriz francesa nos recuerda que cuidarse también es un acto de placer. Quizá ahí resida parte del encanto que tanto admiramos: esa capacidad de disfrutar el proceso sin convertirlo en una obligación.

Como ella misma resume: “Me siento bien porque me siento libre”.

Si te interesa explorar el estilo de yoga que practica Philippine, consulta nuestra guía completa de yoga Iyengar para empezar con las bases.