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Postura del puente (Setu Bandhasana): fortalece espalda y glúteos

Descubre cómo practicar la postura del puente correctamente. Guía de Setu Bandhasana con beneficios para la columna, variaciones y contraindicaciones.

Lucía Fernández
Lucía Fernández

Especialista en Meditación y Bienestar

Postura del puente (Setu Bandhasana): fortalece espalda y glúteos

La postura del puente es una de las asanas más completas para fortalecer tu espalda baja y glúteos. Su nombre en sánscrito es Setu Bandhasana, que significa literalmente “postura del puente que sella”. Esta flexión dorsal es perfecta tanto para principiantes como para practicantes avanzados.

A diferencia de otras posturas más complicadas, el puente es accesible para casi todos. Te permite trabajar la fuerza de tu espalda mientras estiras el pecho y los hombros. Es una asana que encontrarás en casi todas las clases de yoga.

Qué es la postura del puente

Setu Bandhasana es una flexión dorsal que se practica tumbado boca arriba. Elevas las caderas hacia el techo mientras mantienes los hombros y pies apoyados en el suelo. Esta posición crea un arco con tu cuerpo que recuerda a un puente.

Esta asana pertenece a las flexiones dorsales suaves, ideales para calentar la columna. A diferencia de la rueda, el puente no requiere tanta flexibilidad ni fuerza. Es perfecta para empezar a trabajar la movilidad de tu columna vertebral.

Tradicionalmente se practica en secuencias de Hatha y Vinyasa yoga. También es común en clases de yoga restaurativo cuando se usa con apoyos. Su versatilidad la convierte en una postura fundamental que debes dominar.

Beneficios de Setu Bandhasana

La postura del puente ofrece beneficios físicos y mentales increíbles. Fortalece grupos musculares importantes mientras calma tu mente. Practicarla regularmente transformará tu postura y tu bienestar general.

Fortalecimiento muscular

Esta asana trabaja intensamente tus glúteos, isquiotibiales y músculos paravertebrales. Cuando elevas las caderas, estos músculos se activan para sostener tu peso. Con la práctica constante, notarás que tu espalda baja gana mucha fuerza.

También fortalece los músculos del core y las piernas. Mantener la posición requiere que tu abdomen trabaje para estabilizar la pelvis. Tus cuádriceps y pantorrillas también se activan para mantener los pies firmes en el suelo.

Fortalecimiento de glúteos y espalda baja en el puente

Mejora la salud de la columna

El puente moviliza todas las vértebras de tu columna. Esta extensión suave contrarresta las horas que pasas encorvado frente al ordenador. Ayuda a aliviar la tensión acumulada en la zona lumbar.

Practicarla regularmente mejora la flexibilidad de tu columna vertebral. Esto es fundamental para prevenir dolores de espalda crónicos. Además, estimula la circulación sanguínea hacia los discos intervertebrales, manteniéndolos sanos y nutridos.

Apertura de pecho y hombros

Esta postura estira profundamente el pecho, los hombros y el cuello. Al elevar las caderas, tu esternón se acerca al mentón. Esto abre toda la zona frontal del cuerpo que suele estar contraída.

Es especialmente beneficiosa si sufres de hombros redondeados o postura cifótica. Contrarresta los efectos de estar sentado todo el día. Tu respiración también mejora al expandir la caja torácica de esta manera.

Estimulación de órganos internos

La posición invertida del puente estimula tu sistema digestivo y mejora la circulación. Al comprimir suavemente el abdomen, masajeas los órganos internos. Esto puede ayudar con problemas de digestión lenta o estreñimiento.

También beneficia a tu sistema endocrino, especialmente la glándula tiroides. La ligera compresión de la garganta en la posición completa estimula esta glándula. Esto puede ayudar a regular tu metabolismo de forma natural.

Apertura de pecho en Setu Bandhasana

Reducción del estrés

Como todas las flexiones dorsales, el puente tiene un efecto energizante y calmante simultáneamente. Reduce los niveles de cortisol, la hormona del estrés. Te ayuda a sentirte más equilibrado y centrado mentalmente.

Esta postura también alivia la ansiedad y la fatiga mental. La apertura del pecho permite una respiración más profunda. Esto activa tu sistema nervioso parasimpático, responsable de la relajación.

Cómo hacer la postura del puente correctamente

Dominar la técnica correcta es fundamental para aprovechar todos los beneficios. Sigue estos pasos cuidadosamente. No te apresures, la alineación es más importante que la altura que alcances.

Posición inicial

Túmbate boca arriba sobre tu esterilla con las piernas estiradas. Dobla las rodillas y acerca los pies hacia los glúteos. Tus pies deben estar paralelos entre sí, separados al ancho de las caderas.

Coloca los brazos a los lados del cuerpo con las palmas hacia abajo. Asegúrate de que tus hombros estén relajados. Presiona suavemente la nuca contra el suelo para alargar el cuello antes de empezar.

Ejecución paso a paso

Presiona firmemente los pies contra el suelo y comienza a elevar las caderas. Mantén las rodillas alineadas con los tobillos, sin dejarlas caer hacia dentro. Imagina que tienes un bloque entre los muslos para mantener las piernas paralelas.

Una vez arriba, entrelaza las manos debajo de tu espalda. Esto te ayudará a acercar los omóplatos entre sí. Presiona los antebrazos contra el suelo para ganar más altura en el pecho.

Mantén el cuello neutral, sin girar la cabeza. Tu peso debe estar distribuido entre los hombros y los pies. Respira profundamente y mantén la posición durante 30 segundos a 1 minuto.

Para salir, suelta las manos y baja lentamente vértebra por vértebra. No dejes caer las caderas de golpe. Una vez abajo, abraza las rodillas al pecho para neutralizar la columna.

Alineación correcta de pies y rodillas en el puente

Errores comunes que debes evitar

Muchas personas separan demasiado las rodillas o los pies. Esto reduce el trabajo de los glúteos y puede causar tensión en la espalda baja. Mantén siempre los pies paralelos y las rodillas alineadas con los tobillos.

Otro error común es forzar el cuello girando la cabeza durante la postura. Esto puede causar lesiones cervicales. Mantén la mirada hacia el techo y el cuello completamente relajado.

No eleves las caderas demasiado si sientes dolor en la espalda baja. Es mejor quedarse más bajo con buena alineación. La calidad siempre es más importante que la altura que alcances.

Variaciones de la postura del puente

Existen varias variaciones que puedes explorar según tu nivel. Algunas son más suaves, otras más desafiantes. Experimenta con diferentes versiones para encontrar la que mejor se adapte a ti.

Puente con bloque (restaurativo)

Coloca un bloque de yoga debajo del sacro para un puente pasivo. Esta versión es perfecta para restaurar energía sin esfuerzo muscular. Puedes mantenerla durante 3-5 minutos mientras respiras profundamente.

Ajusta la altura del bloque según tu comodidad. Empieza con la altura media y ve experimentando. Esta variación es ideal para relajar el sistema nervioso después de un día estresante.

Puente con una pierna elevada

Desde el puente tradicional, extiende una pierna hacia el techo. Mantén las caderas niveladas sin que se desequilibren. Esta versión añade un componente de equilibrio y fortalecimiento extra.

Cambia de pierna después de 5-10 respiraciones. Este ejercicio trabaja intensamente los glúteos de la pierna de apoyo. Es excelente para corregir desequilibrios musculares entre ambos lados.

Variaciones avanzadas de la postura del puente

Puente dinámico

Sube y baja las caderas coordinando con la respiración. Inhala al subir, exhala al bajar. Repite este movimiento 8-12 veces para calentar la columna.

Esta versión dinámica es perfecta como calentamiento antes de posturas más intensas. También ayuda a movilizar la columna si pasas muchas horas sentado. Muévete lentamente y con control total.

Puente apoyado en la pared

Coloca los pies en la pared con las rodillas dobladas a 90 grados. Desde aquí eleva las caderas como en el puente tradicional. Esta variación reduce la presión en las rodillas y los pies.

Es ideal si tienes problemas en las articulaciones de los tobillos. También te permite enfocarte más en el trabajo de los glúteos. La pared proporciona un punto de apoyo estable muy útil.

Cuándo practicar Setu Bandhasana

Mujer en postura de puente con espalda arqueada y brazos entrelazados bajo cuerpo El **momento del día** puede influir en cómo experimentas esta postura. También es importante saber en qué parte de tu **práctica** incluirla. Aquí te cuento cuándo sacarle el máximo provecho.

En tu secuencia de yoga

El puente funciona bien como preparación para flexiones dorsales más profundas. Úsala como calentamiento antes de trabajar la espalda. También es perfecta después de torsiones para neutralizar la espalda.

Muchos profesores la incluyen al final de la clase, antes de Savasana. Esto aprovecha que tus músculos ya están calientes. Puedes mantenerla más tiempo y profundizar más en la postura con seguridad.

Hora del día ideal

Practicar el puente por la mañana te ayuda a despertar y energizar el cuerpo. Es perfecta para contrarrestar la rigidez de haber dormido. Te dará un impulso de energía para empezar el día activo.

Por la tarde-noche también es beneficiosa para aliviar la tensión acumulada. Si trabajas sentado, te ayudará a abrir el pecho y estirar la espalda. Combinada con respiración profunda, calma la mente antes de dormir.

Frecuencia recomendada

Para ver resultados significativos, practica esta postura al menos 3-4 veces por semana. La consistencia es más importante que la intensidad. Incluso 30 segundos diarios marcarán diferencia en tu flexibilidad y fuerza.

Si sufres de dolor de espalda crónico, consulta con tu médico primero. Luego podrías practicarla diariamente como parte de tu rutina terapéutica. Escucha siempre a tu cuerpo y respeta sus límites.

Contraindicaciones y precauciones

Aunque el puente es generalmente segura, no es apropiada para todos. Conocer las contraindicaciones te ayudará a practicar con seguridad. Consulta siempre con un profesional si tienes dudas sobre tu condición.

Lesiones de cuello

Si tienes lesiones cervicales o problemas de cuello, evita esta postura. La posición puede agravar condiciones como hernias discales cervicales. Tampoco la practiques si sufres de latigazo cervical reciente.

En caso de molestias leves, puedes usar una manta doblada bajo los hombros. Esto reduce la presión en el cuello. Pero si sientes dolor agudo, sal inmediatamente de la postura.

Problemas de espalda baja

Aunque el puente fortalece la espalda, debes tener cuidado con ciertas condiciones. Si tienes espondilolisis o estenosis espinal, consulta con tu médico primero. La extensión podría empeorar estas condiciones.

Para dolores lumbares leves, el puente suele ayudar. Pero empieza con la versión restaurativa usando un bloque. Nunca fuerces si sientes dolor punzante en la zona lumbar.

Embarazo

Durante el primer trimestre puedes practicar el puente con normalidad. A partir del segundo trimestre, es mejor evitar posturas boca arriba prolongadas. Esto puede comprimir la vena cava y reducir el flujo sanguíneo.

Opta por versiones modificadas o el puente con bloque. Consulta siempre con tu instructor de yoga prenatal. Cada embarazo es diferente y requiere adaptaciones personalizadas.

Otras precauciones

Evita esta postura si tienes presión arterial alta no controlada. Las inversiones suaves como el puente pueden afectar tu presión. Si tienes glaucoma o problemas de retina, también ten precaución.

Durante la menstruación, escucha a tu cuerpo. Algunas mujeres prefieren evitar flexiones dorsales intensas estos días. Si te sientes cómoda, adelante, pero respeta cualquier señal de malestar.

Consejos para profundizar tu práctica

Una vez que domines la versión básica, hay formas de llevar el puente más allá. Estos consejos te ayudarán a evolucionar en tu práctica. Recuerda que el progreso llega con paciencia y constancia.

Usa la respiración consciente

Inhala profundamente antes de elevar las caderas. Mantén respiraciones largas y controladas mientras sostienes la postura. Esto oxigena tus músculos y te ayuda a mantener la posición más tiempo.

Visualiza que tu respiración fluye por toda la columna vertebral. Esto mejora la conexión mente-cuerpo durante la práctica. Exhala completamente al bajar para soltar toda la tensión acumulada.

Activa conscientemente tus músculos

No te limites a elevar las caderas pasivamente. Activa conscientemente tus glúteos y core durante toda la postura. Imagina que empujas el suelo con los pies para crear más espacio.

Presiona los omóplatos hacia la columna para abrir más el pecho. Mantén los muslos internos activos como si sujetaras un bloque invisible. Esta activación consciente multiplica los beneficios de la postura.

Combínala con otras asanas

Crea una secuencia que complemente el trabajo del puente. Antes, practica Balasana (postura del niño) para preparar la espalda. Después, haz torsiones suaves para neutralizar la columna.

El puente funciona perfectamente con apertura de caderas. Combínala con paloma o mariposa para una práctica equilibrada. Termina siempre con Savasana para integrar los beneficios de tu sesión.

Mantén la consistencia

La clave para dominar Setu Bandhasana es la práctica regular. Es mejor hacerla 3 minutos cada día que 30 minutos una vez al mes. Tu cuerpo necesita repetición para desarrollar fuerza y flexibilidad.

Lleva un diario de tu práctica para observar tu progreso. Anota cómo te sientes antes y después de practicar. Con el tiempo notarás mejoras en tu postura, energía y bienestar general.

Integra el puente en tu vida diaria

La postura del puente no tiene que limitarse a tu esterilla. Puedes integrar sus principios en tu rutina diaria. Pequeños momentos de práctica suman grandes beneficios con el tiempo.

Hazla por la mañana, incluso antes de levantarte de la cama. Es una forma perfecta de despertar tu columna y activar tu cuerpo. Solo necesitas 2-3 minutos para notar la diferencia en tu nivel de energía.

También puedes practicarla durante descansos en el trabajo. Si pasas horas sentado, tu espalda te lo agradecerá enormemente. Encuentra un espacio tranquilo y dedica unos minutos a esta postura revitalizante.

Recuerda que el yoga no es solo lo que haces en la esterilla. Es cómo llevas la consciencia y el cuidado a cada momento del día. La postura del puente es una herramienta poderosa para mantenerte fuerte, flexible y equilibrado.

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